Un crimen y el avance del narco.

A pocas horas del crimen que conmovió al país, el asesino es investigado por una presunta conexión con un jefe narco.

Por Paulo Kablan
Especial para El Destape

El brutal crimen, tras un incidente de tránsito, de Nicolás Gómez en Villa Tesei, puso en evidencia, una vez más, la violencia que crece a diario en las calles del país.

Pero en este caso, además, dejó en evidencia cómo la denominada "cultura narco" cada día se cobra más vidas inocentes. Gómez nunca lo supo, pero quien presuntamente lo atacó a tiros, y que conducía un costoso auto Mini Cooper, sería el chofer del presunto jefe de una pesada banda de narcos.

Gastón Carlesi, de 33 años, está preso por el homicidio. Pero también es investigado por narcotráfico. El auto, en rigor, habría sido recientemente comprado por un joven conocido como "El Pelado de Willam Morris". Se trataría del jefe de una banda de distribuidores de cocaína.

Si bien son personajes conocidos, especialmente en los boliches del Oeste del Gran Buenos Aires, ¿nadie lo frenó? ¿Los dueños de los locales no hacen nada para cuidar a sus clientes? ¿Intendentes, concejales, policías, etc, no saben nada o no quieren hacer nada contra estas bandas?

Las preguntas podrían ser interminables, pero lo cierto es que las bandas de narcomenudeo son cada vez más visibles, se mueven en costosos autos, venden a la vista de todos, y muy pocos funcionarios parecen dispuestos a ponerle un freno.

Fuente: Eldestapeweb.com

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