Apresan al mayordomo del Papa por revelar documentos secretos.

Nuevo escándalo en la Santa Sede, que viene de expulsar al presidente del Banco Vaticano. Paolo Gabriele, de 46 años, fue encontrado en posesión ilegal de papeles “reservados”, según la denuncia de las autoridades eclesiásticas.

El mayordomo del Papa fue arrestado en el Vaticano después de que la Gendarmería lo encontrara “en posesión ilegal de documentos reservados” de la Santa Sede. El empleado, que forma parte de la llamada “familia del Papa”, está acusado de haber filtrado comunicaciones privadas a los medios en el caso conocido como “Vatileaks”. Este el segundo escándalo en la semana que involucra al Estado más pequeño del mundo, ya que el jueves el Instituto para las Obras de Religión (IOR), también conocido como Banco Vaticano, había echado a su presidente, Ettore Gotti Tedeschi, que estaba siendo investigado por lavado de dinero.
El arresto fue confirmado por el vicedirector de la Sala de Prensa de la Santa Sede, Ciro Benedittini, poco después de que el vocero vaticano, Federico Lombardi, informara que agentes de la Gendarmería habían localizado “a una persona en posesión ilegal de documentos reservados”, que había sido puesta a disposición de la magistratura “para mayores averiguaciones”. Aunque oficialmente no se comunicó hasta el momento el nombre del detenido, fuentes vaticanas citadas por los medios italianos aseguraron que se trata de Paolo Gabriele, de 46 años, que trabaja de mayordomo de Benedicto XVI.
La familia vaticana, nombre con que se conoce a la comunidad Memories Domini que cuida la residencia papal, está compuesta por el mayordomo, dos secretarios, los sacerdotes Georg Gänswein y Alfred Xuereb y cuatro laicas italianas. Gabriele, que vive en una casa anexa al Vaticano junto a su esposa y sus tres hijos, trabaja allí desde 2006 tras estar al servicio del prefecto de la Casa Pontificia, el arzobispo James Harvey.
Aunque la noticia fue difundida ayer, el mayordomo fue detenido el jueves y puesto a disposición del promotor de Justicia del Vaticano (fiscal), Nicola Picardi, quien le interrogó durante varias horas. Lo que se busca probar es si el detenido es quien filtró a los medios de comunicación los documentos reservados enviados al papa Benedicto XVI y su secretario Ganswein. La pesquisa que busca esclarecer el caso está dirigida por el cardenal español Julián Herranz, de 82 años, que preside la Comisión Cardenalicia, una estructura ad hoc creada en abril por la Santa Sede.
De confirmarse que “Il Corvo” (el cuervo), tal como se conoce a Gabriele, es responsable de las filtraciones, el mayordomo podría ser condenado hasta a 30 años de cárcel por violación de la correspondencia de un jefe de Estado, lo que equivale a un atentado contra su seguridad. Sin embargo, fuentes vaticanas expresaron sus dudas sobre la detención y consideraron que Gabriele podría ser solamente “un chivo expiatorio”.
Aunque a priori los dos casos que mantuvieron a la Santa Sede en vilo esta semana no tienen vinculación entre sí, algunos medios italianos especularon con que la destitución de Tedeschi del IOR también podría estar relacionada con el escándalo Vatileaks ya que entre los documentos confidenciales filtrados a los medios había información sobre la conducta financiera del Banco Vaticano.
Efe, dpa y Ansa

 

Fuente: Tiempo Argentino

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